Autoridades buscan consolidar los avances en transparencia y cumplimiento tras la salida del país de la lista gris
Panamá ha iniciado un proceso de fortalecimiento institucional con miras a la quinta ronda de evaluación del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), prevista para 2027, informó el diario La Estrella.
El objetivo, según confirmó la superintendente de Sujetos No Financieros, Isabel Fernández, es mantener los avances alcanzados en materia de transparencia, prevención del lavado de dinero y financiamiento del terrorismo.
Durante su intervención en el Décimio Congreso Internacional de Cumplimiento de la Asociación de Oficiales de Cumplimiento de Panamá (ASOCUPA), Fernández destacó que el país se encuentra en una etapa de consolidación luego de haber salido de las listas de seguimiento del GAFI en el 2023.
“Queremos que nuestro sistema sea cada vez más fuerte, más seguro y más preparado para la próxima evaluación”, afirmó.
La funcionaria subrayó la importancia de que todas las instituciones del sistema antilavado, tanto financieras como no financieras, refuercen sus mecanismos de gobernanza y cumplimiento interno.
Entre las herramientas clave, mencionó el Registro Único de Beneficiarios Finales (RUBF), que garantiza la transparencia en la propiedad de las sociedades y constituye uno de los elementos más valorados por el GAFI.
Por su parte, Ricardo Moreno, supervisor de Capacitación de la Unidad de Análisis Financiero (UAF), resaltó que la entidad avanza hacia un modelo de supervisión más tecnológico y eficiente, basado en la modernización de sus plataformas digitales para la recepción y análisis de reportes de operaciones sospechosas.
“La tecnología avanza y debemos avanzar con ella”, aseguró Moreno, al tiempo que recalcó que toda la información enviada a la UAF “se maneja con absoluta reserva y seguridad”.
Por su parte, el especialista internacional Guillermo Hernández advirtió que la próxima evaluación pondrá mayor énfasis en la efectividad real del sistema, más que en el cumplimiento técnico.
Señaló que los evaluadores buscarán evidencia de resultados concretos, como sanciones, estadísticas y mejoras verificables en la implementación de controles, especialmente en temas emergentes como los activos virtuales.
Tanto Fernández como Moreno coincidieron en que la quinta ronda de evaluación representa una oportunidad para demostrar la madurez institucional de Panamá y consolidar su reputación como país comprometido con la integridad financiera, la transparencia y la cooperación internacional.