Frustrados e indignados, los venezolanos se sienten sometidos a un mayor confinamiento tras la decisión del gobierno de suspender los vuelos de la aerolínea panameña Copa -su principal vía de conexión-, un paso más en el creciente aislamiento internacional de Venezuela
La medida es parte de la suspensión, por tres meses prorrogables, de las relaciones económicas con altos funcionarios y empresas de Panamá, que anunció el jueves el gobierno de Nicolás Maduro, provocando el retiro del embajador panameño en Caracas y el llamado a consultas del venezolano.
Delcy Rodríguez, presidenta de la oficialista Asamblea Constituyente que rige el país como suprapoder, defendió este viernes la medida como respuesta a la “agresión” que significaron las sanciones que impuso Panamá el 29 de marzo contra Maduro y otros 55 funcionarios venezolanos.
“Es una medida de reciprocidad frente a las agresiones del gobierno” de Juan Carlos Varela, aseguró Jorge Rodríguez, jefe de campaña de Maduro, quien busca la reelección en los comicios del 20 de mayo. El funcionario calificó también de “muy corrupto” al presidente panameño.
Ambos países justifican las medidas en la protección de sus sistemas financieros, acusándose mutuamente de favorecer el blanqueo de capitales.
“La reacción es desproporcionada y los afectados somos los venezolanos. Estamos cada vez más encerrados: en el hemisferio, Venezuela será la única isla en tierra continental; en el mundo, Corea del Norte y nosotros”, dijo a AFP la internacionalista Milagros Betancourt.
Cientos de venezolanos y un puñado de extranjeros confundidos se aglomeraban el viernes en los dos principales aeropuertos, Maiquetía (que sirve a Caracas) y Maracaibo (oeste), donde empleados de Copa explicaban que recibirían el reembolso del boleto.
“No quiero el reembolso, lo que deseo es largarme del país”, dijo molesta en el aeropuerto de Maracaibo Victoria Martínez, de 34 años, quien iba a volar a Chile, emigrando como lo han hecho cientos de miles de venezolanos en los últimos años.
Hundido en una severa crisis, el país petrolero vio retirarse a unas 12 aerolíneas desde 2014 por deudas millonarias, y sólo operan 10 -siete a Europa-. Copa es la que ofrece más frecuencias entre Venezuela y el mundo -diez vuelos diarios- y es vital para la conexión con el resto de América Latina.