El concejal opositor Fernando Albán, quien se hallaba detenido por un presunto atentado contra el presidente venezolano Nicolás Maduro, se suicidó este lunes en la sede del servicio de inteligencia, aseguró el fiscal general Tarek William Saab.
Su partido Primero Justicia denunció que se trató de un “asesinato”. Saab explicó telefónicamente a la televisora gubernamental VTV que Albán “solicitó ir al baño y estando allí se lanzó al vacío desde un piso diez”.
Albán, concejal del municipio Libertador de Caracas por la agrupación opositora Primero Justicia, fue detenido el pasado viernes acusado de participar en la explosión de dos drones cerca de la tarima en la que Maduro pronunciaba un discurso el 4 de agosto, durante una parada militar en la capital.
El mandatario denuncia ese hecho como un “magnicidio en grado de frustración” y responsabiliza como autor intelectual al diputado Julio Borges, fundador de Primero Justicia y exiliado en Colombia.
La “crueldad de la dictadura terminó con la vida de Fernando Albán”, reaccionó Borges en Twitter, al recordar que el concejal había viajado a Nueva York la semana pasada para visitar a sus hijos y lo acompañó a Naciones Unidas.
“No va a quedar impune su muerte”, añadió el diputado, a quien Maduro acusa de formar parte de una trama para derrocarlo con la ayuda de Estados Unidos y Colombia.
El fiscal anunció una “investigación exhaustiva”. “Las causas por las cuales lo hizo vamos a esclarecerlas, las vamos a investigar en todas sus magnitudes”, sostuvo.
El excandidato presidencial Henrique Capriles, miembro del mismo partido que Albán, señaló que lo ocurrido “es total responsabilidad del régimen”. “Quienes conocimos a Fernando sabemos que NUNCA podría haber actuado contra su vida”, subrayó en Twitter.
El abogado del concejal, Joel García, dijo a periodistas desde la sede del Sebin en Caracas que no pueden afirmar ni negar que se tratara de un suicidio.
“¿Cómo vamos a hablar de suicidio si es una persona que se acaba de morir? ¿Cómo es que el fiscal se atreve a decirlo? Lo primero que cualquier órgano policial debe decir es que hay una investigación, puede ser suicidio, puede ser homicidio”, acotó.
El ministro de Interior y Justicia, general Néstor Reverol, lamentó la muerte del político quien, según dijo, también estaba “involucrado en actos desestabilizadores dirigidos desde el exterior”.
Según el ministro, Albán se suicidó “en el momento en que iba a ser trasladado al tribunal” que conocía su causa.
El también concejal de Primero Justicia, Carlos García, murió en septiembre de 2017 por un accidente cardiovascular tras permanecer diez meses detenido en calabozos del Sebin en Guasdualito, estado Apure. El partido denunció entonces que le negaron la atención médica.
En Venezuela hay unos 236 presos políticos, según la ONG Foro Penal.