A unos cuantos días de la Navidad de 2013, Stuart Dempster alquiló un auto para ir de Bangkok a la ciudad rural de Ban Phai, al noreste de Tailandia. A Dempster, entrenador australiano de atletismo de 55 años, lo acompañaba un contratista de seguridad alto y fornido. Ambos se preparaban para secuestrar a la hija…