Cada mañana, José Aguilera inspecciona las hojas de sus plantas de cambur y café en su finca en el oriente de Venezuela y calcula cuánto podrá cosechar: casi nada. Las explosivas llamaradas de la quema en antorcha de los pozos petroleros cercanos arrojan un residuo aceitoso e inflamable sobre las plantas. Las hojas se queman, se…