El diamante descubierto en Sierra Leona está a la espera de que expertos evalúen por cuanto dinero se ofrecería por los 706 quilates
Un enorme diamante de 706 quilates fue hallado en Sierra Leona, anunció el jueves la presidencia de ese país, que prometió un “proceso de comercialización transparente” en un país marcado por el tráfico de “diamantes de sangre” durante la guerra civil (1991-2002).
El diamante fue hallado en la provincia de Kono, en el este del país, por un pastor protestante, Emmanuel Momoh, buscador ocasional de diamantes. Fue presentado el miércoles al jefe de Estado, Ernest Bai Koroma, por un jefe tribal de la región, según un comunicado de la presidencia.
“El presidente Koroma agradeció al jefe y a los suyos de no haber vendido el diamante mediante contrabando fuera del país”, según el texto, asegurando que “el proceso de comercialización será transparente”.
La controversia sobre los “diamantes de sangre”, las piedras preciosas que sirvieron para financiar conflictos en África, como en Angola o en Sierra Leona, desembocó en 2000 con el régimen de certificación de las piedras, llamado Kimberley, apoyado por la ONU y que reagrupa a 75 países.