El régimen de Cuba deportó a los expresidentes de Bolivia, Jorge Quiroga, y de Colombia, Andrés Pastrana, que planeaban recibir en la isla este jueves el Premio Payá, que entrega cada año la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia
Ambos exmandatarios viajaron para recoger el premio como representantes de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), integrada por 37 expresidentes y exjefes de Gobierno.
El premio se instituyó en memoria del líder opositor Oswaldo Payá, que falleció hace cinco años en un accidente de tráfico del que su familia responsabiliza al régimen cubano
Pastrana y Quiroga, tras su arribo ayer al aeropuerto internacional José Martín fueron retenidos por dos horas en la terminal aérea y embarcados posteriormente en un vuelo a Bogotá.
“La dictadura de Cuba nos deportó hoy de la isla por defender los principios democráticos de la región. Nos han dicho que somos inadmisibles. Qué triste”, dijo Quiroga a medios de prensa colombianos.
El febrero del año pasado, el régimen cubano impidió el ingreso a la isla a Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), que también intentó recibir el Premio Payá.
Almagro denunció que las autoridades cubanas no solo le negaron el visado para su pasaporte oficial de la OEA, algo inédito, según fuentes de la organización. También le advirtieron de que ni siquiera podría entrar con su pasaporte diplomático uruguayo, que no requiere de visado para la isla.
La justificación en esa ocasión la dio el diario oficial Granma. “Ni la OEA ni ninguno de sus funcionarios serán jamás bienvenidos en la Cuba revolucionaria”.
Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano ratificó la postura haciendo creer que la visita era parte de un plan para “montar en La Habana una abierta y grave provocación contra el gobierno cubano, generar inestabilidad interna, dañar la imagen internacional del país y, a la vez, afectar la buena marcha de las relaciones diplomáticas de Cuba con otros Estados”.
Cuba considera a Almagro un enemigo político y a la OEA un organismo manejado por Washington del que, tras la revolución de 1959, fue expulsada en 1962.
Cuba también impidió el año pasado la entrada al expresidente mexicano Felipe Calderón y a la exministra chilena Mariana Aylwin, que igualmente pretendían estar en la ceremonia del Premio Payá.