En entrevista a TVN Noticias, el magistrado Hernán De León, reiteró que “no existe grabación, filmación o presión”, que podría estar recibiendo con relación al caso de los pinchazos telefónicos.
Después de permanecer bajo perfil por varios días, el magistrado De León, se armó de valor, y en declaraciones exclusivas a esta televisora local, dio a conocer su versión frente a lo actuado el pasado 13 de agosto, por la procuradora Kenia Porcell, que reveló públicamente los detalles de una supuesta conversación personal que sostuvo con él, la tarde del lunes, 30 de julio de 2018.
De León reiteró las mismas declaraciones que brindó el pasado 10 de agosto-durante la inauguración de un juzgado en Boquete- sobre la forma como se está llevando el caso Martinelli , lo dijo sin titubeos, repitiendo al periodista Eduardo Lim Yueng, algunas palabras varias veces: “no me consta, no existe grabación, es decir, a mí, hoy a mí no me consta ningún tipo de grabación, de filmación, absolutamente nada de mi persona, ni extorsión, ni presión, ni coacción, ningún tipo eso”.
Versiones contradictorias
Las declaraciones del magistrado presidente interino contradicen la versión de la procuradora Porcell, que a través de un video manifestó que el magistrado De León fue a su despacho para decirle que el caso del expresidente Ricardo Martinelli- que está siendo investigado por los pinchazos telefónicos- que se dieron durante su administración, “se va a caer, se va a anular y lo van a remitir a la Procuraduría”.
En ese video, Porcell dijo que De León le confesó que lo habían pinchado: “¡me grabaron, me grabaron! y que, le reveló que hasta “había visto a una mujer que estaba desnuda en la parte de arriba frente a su computador”.
Al ser cuestionado el magistrado De León sobre estas últimas declaraciones, dijo que no iba a seguir ahondando en esas interioridades de esa conversación.
El periodista Lim Yueg también le preguntó ¿cómo se usa un magistrado en la Corte? tomando en cuenta que según Porcell, el magistrado De León le dijo que su colega “Ayú los usa”.
Según el magistrado De León “todos los magistrados nos usamos, en el buen sentido ético de ayudarnos, de colaborarnos”.
Entre sorpresas y decepciones
Porcel también reiteró varias veces que “por respeto al derecho a la intimidad, de una conversación de manera informal, no voy a divulgar qué pasó en esa conversación”.
Dice que no va presentar ninguna denuncia penal porque no va “a echarle más gasolina” a la situación, de una declaración que “ha golpeado al país”, “a la institucionalidad de la CSJ”.
Explicó que su inercia es para evitar que se le declare impedido en la investigación que se realiza en esta ocasión al caso de los pinchazos telefónicos, donde se investiga al expresidente Martinelli.
El magistrado presidente dijo que está “muy sentido” “sorprendido”, con las declaraciones que hizo públicas Porcell y que, como buen cristiano, “le pidió a Dios que la perdone”, porque lo que hizo no fue “ético ni prudente”.
No descartó que la acción de la Procuradura pudo haber sido producto de “agendas ocultas”.
De León, también aclaró que cerró su cuenta de twitter para que no lo estuvieran golpeando.
¿Presión mediática?
Explicó, que todo esto que se ha armado puede ser un ataque mediático con la finalidad de realizar presiones, sobre todo a él porque al momento de una votación-sin importar el caso que se tenga que fallar-, él es el que vota de último. Es decir, su voto siempre va a ser decisivo ya que son nueve magistrados.
Sobre los supuestos cinco mil pinchazos que le dijo a Porcell aclaró que en esa conversación “utilizó un lenguaje coloquial, fue una conversación informal, fueron expresiones folclóricas como somos todos los panameños”.
De forma contundente manifestó que “no se declarará impedido en el caso de Ricardo Martinelli”.