Una fuerte explosión seguida de un incendio, que ya está bajo control, en una refinería la madrugada del sábado en el sur de Alemania dejó al menos diez heridos y obligó a evacuar temporalmente a casi 2.000 habitantes.
Cerca de 600 personas, entre bomberos, servicios de rescate y policías, acudieron al lugar del incidente. Según la policía local, el fuego ya está prácticamente apagado.
Un balance anterior informaba de al menos ocho heridos.
La policía precisó además que no se había detectado “ninguna contaminación peligrosa”, lo que permitió levantar las advertencias dadas anteriormente en este sentido.
La explosión, cuyo origen se desconoce, se produjo en un sector de producción de gas y combustible líquidos de una instalación de la compañía Bayernoil situada cerca del río Danubio en la región de Baviera, cerca de las 05H30 de la mañana (03H30 GMT).
Todos los heridos son empleados de la refinería, situada a unos 15 km de Ingolstadt, en la región de Baviera y cerca del Danubio. Cuatro de ellos, uno en estado grave, tuvieron que ser hospitalizados, precisó la policía.
Según la cadena de radiotelevisión pública local Bayerischer Rundfunk, “la onda de choque [de la explosión] se sintió en varios kilómetros” y por la zona se expandió una nube de humo.
Varias tiendas se encontraron con sus escaparates quebrados, según imágenes compartidas en Twitter.
En otras imágenes que circulaban por las redes sociales se veían grandes llamas elevándose por encima de la refinería en las primeras horas de la mañana.
Muchos habitantes y curiosos, que se despertaron con la explosión, se desplazaron a los campos que rodean la refinería para observar las labores de rescate.