Smithsonian muestra el impacto del Canal de Panamá en ruta de ballenas jorobadas

Smithsonian muestra el impacto del Canal de Panamá en ruta de ballenas jorobadas
El turismo de avistamiento de cetáceos empezó a desarrollarse en Panamá a finales de 1990 y, de acuerdo con la organización Wetlands International, la actividad reporta unos ingresos anuales superiores a los tres millones de dólares Foto/AFP

La entidad especializada busca que los tomadores de decisiones, aprovechen los resultados de la investigación para desarrollar mejores políticas públicas.

Con el objetivo de generar políticas públicas, indicó el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés).

Una exhibición  sobre el impacto de los buques que navegaban por el Canal de Panamá sobre las rutas migratorias de las ballenas jorobadas fue inaugurada ayer, jueves 30 de mayo,

La muestra del biólogo marino, Héctor Guzmán, busca la generación de políticas públicas, según informó el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés).

En su investigación   Guzmán se centra en la exploración del proceso y comparación de las rutas de los navíos que entraban a la vía interoceánica con las ballenas jorobadas, que eran marcadas con transmisores satélitales. Y muestra la manera de cómo esto permitió desarrollar un esquema para disminuir el riesgo de que coincidieran en el camino.

La Organización Marítima Internacional (OMI) utilizó sus investigaciones para la creación de una ley que disminuiría las colisiones entre buques y ballenas alrededor del Canal de Panamá.

Ahora, los resultados de su trabajo y el impacto que tuvieron sobre la vida de los cetáceos, se exponen en el Centro Natural Punta Culebra del STRI, en la Calzada de Amador, en el lado Pacífico de la vía interoceánica.

En la muestra se exponen diversos paneles con los senderos marinos que utilizan las ballenas cuando llegan al istmo para reproducirse en sus aguas cálidas y sobre las características de estos gigantes, así como las acciones que se puede tomar como ciudadano para protegerlas y asistir a los científicos que las estudian.

Y es que entre julio y noviembre tiene lugar la migración desde el Polo Sur de las ballenas jorobadas, que recorren más de 8.000 kilómetros para amamantar a sus crías en aguas cálidas, mientras que entre diciembre y marzo ocurre el traslado de las ballenas jorobadas del Polo Norte.

Para el experto, presentar la investigación en una exhibición pública es importante, porque demuestra cómo la ciencia básica que se hace en el Smithsonian puede llevar a la creación de una ley internacional basada en recomendaciones científicas.

“Me tomó casi dos años hacer la ciencia y los modelos matemáticos para ver las colisiones, que llevaron a informar a tomadores de decisiones, un paso muy importante. Los científicos tenemos mucha información de valor para informar la toma de decisiones”, indicó el investigador a medios de comunicación.

El turismo de avistamiento de cetáceos empezó a desarrollarse en Panamá a finales de 1990 y, de acuerdo con la organización Wetlands International, la actividad reporta unos ingresos anuales superiores a los tres millones de dólares.

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