A partir del lunes, los pasajeros no podrán subir a bordo de estos buses por la puerta delantera.
La autoridad de transportes de Londres anunció el viernes nuevas medidas de protección para los conductores de los célebres autobuses rojos de la capital británica, que hicieron un minuto de silencio en memoria de sus 20 colegas muertos por el coronavirus.
A partir del lunes, los pasajeros no podrán subir a bordo de estos buses por la puerta delantera, una medida “muy bienvenida” para Pete Kavanagh, del sindicato Unite en Londres.
El alcalde laborista Sadiq Khan, cuyo padre era conductor de autobús, rindió homenaje a las víctimas.
“Me rompe el corazón que 20 conductores de autobús de Londres hayan perdido la vida a causa de la COVID-19. Es algo que pudo ocurrir a mi padre y a sus amigos”, escribió en Twitter, donde llamó “héroes” a los “empleados de transportes”.
El sindicato Unite ha pedido más equipos de protección para los 20.000 conductores de autobús y para los demás empleados de transportes.
El alcalde de Londres presiona además al gobierno para que preconice el porte de mascarilla para los pasajeros en los transportes. Esta idea ya suscitó en el pasado cierto escepticismo en el ejecutivo, pero ahora dice que sí está en estudio.
En Reino Unido, donde se contabilizan cerca de 14.000 muertos en los hospitales, la zona más afectada es la capital.
Desde la implementación del confinamiento el 23 de marzo en el país, la frecuentación en los autobuses ha caído un 85%.