Ante la declaración de estado de emergencia nacional, decretada por el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen el pasado 13 de marzo, los estamentos de seguridad redoblaron sus acciones y han realizado un trabajo comprometido, humanitario y social para salvaguardar la vida de todos los residentes de nuestro país.
Si es cierto que son parte de sus funciones como servidores públicos, pero más que eso es un compromiso con la Patria, la cual debemos agradecer como ciudadanos, ya que muchos de ellos arriesgan sus vidas por la de los demás.
Hoy en día vemos que a pesar de todo ese sacrificio y apoyo extra que nos brindan, algunas personas no respetan su trabajo, los agreden, los insultan y sobre todo los juzgan.
Como panameños conscientes, hagamos un alto y valoremos a esos hombres y mujeres, a esos seres humanos que están entregándose en cuerpo y alma por mantener la ley y el orden, realizando un trabajo de altura, dando lo mejor de sí para luchar contra ese enemigo oculto que llegó a nuestro país.
Son nuestros héroes, nos acompañan en los cercos sanitarios, en los supermercados, hospitales, en las comunidades, nos cuidan por vía terrestre, aérea y marítima, han sido un apoyo para el plan Panamá Solidario, con las entregas de bolsas de comida y bonos en las áreas de difícil acceso y durante el confinamiento han dado alegría y diversión con su talento musical en diferentes sectores de Panamá.
Nuestra Fuerza Pública cuenta con una basta experiencia y capacidad que ahora resulta fundamental para enfrentar y ayudar a la población en la guerra contra la pandemia causada por el coronavirus.
La autora es periodista y labora en el Ministerio de Seguridad
Exelente publicacion!