El ministro Rogelio Paredes dijo que la institución brindará respuesta en conjunto con las juntas comunales.
Un total de 15 familias fueron evaluadas este sábado tras ser afectadas por distintas contingencias ocurridas por el mal tiempo en los distritos de Chepo en la provincia de Panamá y Alanje en la provincia de Chiriquí.
Las trabajadoras sociales del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot) realizaron una evaluación social a 12 familias de Chepo perjudicadas este viernes por una llovizna con vientos muy fuertes, que provocaron daños parciales y voladura total del techo de los hogares, tanto de madera como de bloque.
De acuerdo con un primer informe de la regional, se afectaron en el corregimiento de Cañita las comunidades de 20 de Diciembre (4 familias), Flor de Laguna (1), Nuevo Horizonte (1) y Genene (1), mientras que en el corregimiento de El Llano hubo daños en la casa de una familia del sector de Loma del Naranjo, localizado en el asentamiento informal La Pista 2 y otras cuatro familias de La Nicora.
El equipo en campo del Miviot levantó los expedientes de 9 casas con desprendimiento parcial del techo y 3 con voladura total, de las cuales dos son viviendas de bloque pegadas con carriola de madera en la comunidad 20 de Diciembre y la otra se ubica en La Nicora, cerca al río Bayano, construida de dos altos cuya parte superior de madera fue pérdida completa.
En Alanje, la regional del Miviot de Chiriquí evaluó a tres familias del corregimiento de Divalá que fueron afectadas por una inundación, tras los fuertes aguaceros, que logró a cubrir metros de las humildes residencias.
El informe social destaca que se atendió a la familia de Elena Salina y Alejandro Montero, cuyo núcleo está compuesto por 2 adultos y 7 menores; a la familia de Paulino Montero, de 55 años, quien ocupa una casa donde habitan en total 15 personas, entre adultos y menores; y a la familia de Amilio Miranda, de 23 años y su cónyuge de 19 años.
Las trabajadoras sociales informaron que esta contingencia afectó a 28 personas en total, entre adultos y menores, que habitan en casas de cañaza con techo de zinc y paja, tienen piso de tierra y están cercanas al río en Divalá.
Las personas damnificadas fueron trasladadas a un albergue temporal, mientras las autoridades locales buscan un lote donde el Miviot pueda brindarles una solución habitacional permanente.
