Andrea Ghez se convierte así en la cuarta mujer que gana un Premio Nobel de Física.
El británico Roger Penrose, el alemán Reinhard Genzel y la estadounidense Andrea Ghez fueron galardonados este martes con el Premio Nobel de Física por sus investigaciones sobre “los agujeros negros”, de los que nada se escapa, ni siquiera la luz.
La mitad del premio recayó en Penrose, de 89 años, por demostrar “que la formación de un agujero negro es una predicción sólida de la teoría de la relatividad general” y la otra mitad del premio se la reparten Genzel, de 68, y Ghez, de 55, por descubrir “un objeto compacto y extremadamente pesado en el centro de nuestra galaxia”, explicó el jurado.
Andrea Ghez se convierte así en la cuarta mujer que gana un Premio Nobel de Física, el más masculino de los seis prestigiosos galardones, una distinción que la científica aseguró tomarse “muy en serio”.
“Estoy encantada de poder servir de modelo para las mujeres jóvenes que se plantean ir hacia este ámbito”, dijo a la AFP Ghez.
“No sabemos qué contiene el agujero negro, no tenemos ni idea, por eso es algo tan exótico, es algo que nos intriga, que nos hace ir más allá en los límites de la comprensión”, había afirmado poco antes la premiada, localizada por teléfono por la Fundación Nobel.
– Cercano a Stephen Hawking –
Penrose ha utilizado desde 1965 la matemática para probar que los agujeros negros pueden formarse y convertirse en una entidad de la que nada, ni siquiera la luz, puede escapar. Sus cálculos demostraron que los agujeros negros son una consecuencia directa de la teoría de la relatividad general de Einstein.
El científico británico es cercano a su célebre compatriota astrofísico Stephen Hawking, fallecido en 2018.
Juntos “probaron matemáticamente que cuando una estrella muy masiva colapsa, termina en agujero negro (…), sus trabajos mostraron que el estado final de la materia vuelve a un solo punto”, explicó a la AFP Luc Blanchet, del Instituto de Astrofísica de París.
“Es una pena que no dieran el Premio Nobel a Penrose y a Hawking antes de que falleciera. Este premio llega dos años después de su muerte, y sus trabajos se remontan a los años 60”, se lamentó.
Desde los años 90, Genzel y Ghez han investigado conjuntamente el centro de la Via Lactea, donde comprobaron la exitencia de un agujero negro supermasivo, bautizado Sagitario A*.
Utilizando los mayores telescopios para estudiar las orbitas de las estrellas cercanas, comprobaron matematicamente por la atracción gravitacional la existencia de un objeto nvisible y con una masa equivalente a unos cuatro millones de veces la del sol.
Los agujeros negros supermasivos son un enigma de la astrofísica, sobre todo por la manera en que llegan a ser tan grandes, y su formación centra muchas investigaciones. Los científicos piensan que devoran, a una velocidad inaudita, todos los gases interestelares que les rodean.
Una primera imagen revolucionaria de estos fwnómenos cósmicos fue revelada al mundo en abril de 2019, por un equipo internacional del Event Horizon Telescope, que registro las radiaciones emitidas por el disco de acreción que rodea al agujero negro en el centro de la Galaxia M87, a más de 50 millones de años luz de la Tierra.
“Es la edad de oro para la investigación sobre los agujeros negros, con maravillar que van a llegar”, declaró Shep Doeleman, director del proyecto, a la AFP.
En 2019, el Nobel de Física fue para tres cosmólogos, el canadiense-estadounidense James Peebles, que siguió los pasos de Einstein para aclarar los orígenes del universo, y los suizos Michel Mayor y Didier Queloz, quienes revelaron la existencia de un planeta fuera del sistema solar.
– Casi un millón de euros –
Los Nobel se están anunciando esta semana como estaba previsto, pero el nuevo coronavirus ha provocado la cancelación de la ceremonia de entrega de los premios el 10 de diciembre en Estocolmo.
Los galardonados, que se reparten cerca de un millón de euros (1,1 millones de dólares) por cada disciplina, recibirán el premio en su país de residencia.
El lunes, el de Medicina confirmó la superioridad de los estadounidenses en el palmarés de las disciplinas científicas al recaer en Harvey Alter y Charles Rice, junto con el británico Michael Houghton, por su papel en el descubrimiento del virus causante de la hepatitis C.
Le seguirá el miércoles el de Química y el jueves el premio de Literatura, el más esperado junto con el de la Paz, que se conocerá el viernes en Oslo.
La única recompensa no prevista en el testamento del inventor sueco, el premio de Economía “en memoria de Alfred Nobel”, creado en 1968, cerrará la temporada el próximo lunes.
BREAKING NEWS:
The Royal Swedish Academy of Sciences has decided to award the 2020 #NobelPrize in Physics with one half to Roger Penrose and the other half jointly to Reinhard Genzel and Andrea Ghez. pic.twitter.com/MipWwFtMjz— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 6, 2020