El organismo de protección civil ratificó este jueves “la alerta roja por tiempo indefinido” debido a la amenaza de una onda tropical que se desplaza por el Caribe.
Las autoridades de Honduras anunciaron este viernes desalojos forzados de pobladores por una onda tropical en el Caribe en momentos en que siguen atendiendo a decenas de miles de afectados por el ciclón Eta, mientras los habitantes de Guatemala fueron llamados a realizar evacuaciones voluntarias.
“La alerta roja ordena los desalojos forzados” con policías y militares, dijo a la AFP Julissa Mercado, portavoz de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) de Honduras.
El organismo de protección civil ratificó este jueves “la alerta roja por tiempo indefinido” debido a la amenaza de una onda tropical que se desplaza por el Caribe, con 90% de probabilidad de fortalecerse como depresión tropical o incluso como tormenta.
En Guatemala, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) emitió recomendaciones para las provincias de Petén, Izabal y Alta Verapaz (norte y noreste), que aún mantienen comunidades afectadas por Eta.
La institución llamó a los habitantes a evitar acercarse a ríos crecidos y otras zonas de riesgo, así como tomar la iniciativa de evacuar “de ser necesario” a los refugios más cercanos.
“Nuestros suelos están sobresaturados y es previsible que tengamos consecuencias que lamentar de nuevo en la infraestructura y la agricultura”, declaró el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei sobre el acercamiento del nuevo ciclón, tras reunirse en Ciudad de Guatemala con su par hondureño, Juan Orlando Hernández.
Si la nueva onda tropical se convierte en tormenta tropical se le asignaría el nombre de Iota. El fenómeno meteorológico lleva un rumbo similar al de Eta, que azotó el Caribe Norte de Nicaragua como huracán Categoría 4.
Eta provocó desbordes de los ríos caudalosos Ulúa, Chamelecón, Humuya y otros en las cercanías de San Pedro Sula, a 180 km al norte de la capital.
En el resto de Honduras se produjeron derrumbes que dejaron en conjunto más de 60 muertos y 2,7 millones de personas afectadas.
Eta provocó más de 200 muertos en Centroamérica en los primeros días de noviembre, según cálculos oficiales.
Más de 40.000 personas aún permanecen en albergues en Honduras, al haberse inundado sus viviendas, según las autoridades de Copeco.