En un escenario sinigual, triste y doloroso, panameños rememoran a sus familiares fallecidos, entre ellos víctimas de la pandemia.
Desde muy temprano, familias panameñas acuden a los diversos cementerios del país a colocar flores, coronas y velas, como muestra de recordatorio a sus seres queridos fallecidos, hoy en el Día de los Difuntos.
Este año, sin duda, es triste y duro para Panamá y el mundo por la cantidad de personas que han fallecido a causa de la pandemia del coronavirus Covid-19. En nuestro país, hasta ayer se contabilizan 7,317 muertes por esta mortal enfermedad.
El Día de los difuntos, según la tradición católica, se ora tanto por aquellos fieles que han acabado su vida terrenal, como también los que se encuentran aún en estado de purificación en el purgatorio.
Fue a partir del 2 de noviembre del año 998 cuando se creó un día especial para los fallecidos. Esto fue instituido por el monje benedictino San Odilón de Francia. Su idea fue adoptada por Roma en el siglo XVI y de ahí se difundió al mundo entero.
En Panamá generalmente el Día de los Difuntos se celebra con romería en camposanto, arreglados con profusión de flores y es visitado por los familiares de los difuntos, que dedican un instante a recordar al finado.
Autoridades locales y diversas personalidades entregan ofrendas florales en las tumbas de personajes notables, cuya labor fue fundamental en el desarrollo histórico del país.
Hoy, en memoria de aquellos que ya no están en este mundo terrenal, está prohibido la venta y consumo de licor hasta después de la medianoche.
Fotografías tomadas por Aris Rodríguez.
