En un ambiente participativo y de colaboración abierta, autoridades de Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Perú se reunieron esta semana en Panamá para compartir sus experiencias, logros y desafíos en sus esfuerzos por mejorar los resultados en la búsqueda de personas desaparecidas y la atención a sus familiares.
Este encuentro de dos días de duración ha reunido autoridades de 7 países, por primera vez, para abordar la problemática de las personas desaparecidas y sus familiares. Distintas metodologías facilitaron el intercambio en torno a experiencias y abordajes conectados, contribuyendo a fortalecer un enfoque conjunto de esfuerzos en este ámbito.
A través de este encuentro, el CICR buscó ofrecer un espacio para que las autoridades participantes pudieran compartir información sobre sus respectivos contextos, logros y los desafíos que enfrentan para llevar a cabo la búsqueda de las personas desaparecidas.
“No podemos actuar solos en favor de las familias; éstas merecen respuestas, pero lamentablemente las respuestas siguen llegando tarde o simplemente no llegan; se necesita contar con un genuino respaldo político de alto nivel, apoyo de la sociedad en general, así como una coordinación entre todas las partes para una respuesta multidisciplinaria. Con este encuentro, buscamos de alguna forma impulsar la cooperación activa para dar respuestas a los familiares de las personas desaparecidas y atender, de mejor manera, sus necesidades, entre otras, económicas, administrativas, de acompañamiento psicosocial”, dijo Susana López, asesora regional de Protección de Vínculos Familiares para América, del CICR.
Averiguar la suerte y el paradero de las personas desaparecidas es un gran reto que exige contar con herramientas jurídicas, técnicas, científicas, operativas, administrativas, presupuestales y asegurar la participación de los familiares en todas las etapas de la búsqueda.
Mientras el fenómeno de la desaparición crece, miles de personas buscan desesperadamente a sus seres queridos, lo cual implica un camino largo y plagado de dificultades. Abordar el problema de la desaparición de personas implica grandes esfuerzos, requiriendo de una inversión importante incluyendo el necesario respaldo de una voluntad política para asegurar su sostenibilidad.
Durante este encuentro, las autoridades estuvieron acompañadas por un equipo multidisciplinario del CICR de la región, incluyendo expertos en materia Jurídica, Forense, Protección de Vínculos Familiares y Salud Mental y Apoyo Psicosocial.
Las autoridades estatales tienen la responsabilidad primaria de prevenir las desapariciones y de aclarar la suerte y el paradero de las personas desaparecidas.
A través de la invitación a esta primera reunión entre pares, el CICR hace un llamado para que los Estados y las sociedades en general reconozcan el sufrimiento de los familiares de las personas desaparecidas, y que las autoridades y actores concernidos se esfuercen por priorizar su búsqueda y garanticen que se haga todo lo posible para que los familiares tengan respuestas y el apoyo requerido.
Las autoridades participantes del evento se manifestaron deseosas de colaborar y comparten el propósito de incrementar los esfuerzos para la búsqueda y la intención de colocar a las familias en el centro de este proceso, incluyendo su acompañamiento durante el mismo.
Según las estimaciones y los registros aportados por los participantes, sumando los contextos de los países participantes, cerca de 500.000 personas aún se encuentran desaparecidas y la misma cantidad de familias aguarda una certeza sobre el destino de sus seres queridos.