El proyecto beneficia a 100 niños de la comarca y a 5 mil de regiones remotas del país.
A 146 kilómetros de la ciudad de Panamá, en la apartada comunidad de Playón Chico en la Comarca Guna Yala, donde se llega tras completar un viaje de siete horas los pequeños Yeliani Ávila y Adir Stocel, juegan y se divierten con los juguetes didácticos que contienen la “Mochila Cuidarte” que le ha entregado el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) para promover su desarrollo en tres áreas sensitivas: motriz, verbal y social.
Cada juego por muy simple que parezca crea una serie de estímulos positivos en estos niños quienes por primera vez están recibiendo motivación temprana en tiempo de pandemia.
El objetivo de la “Mochila Cuidarte” que cuenta con el apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) es expandir servicios de calidad para la atención de niños de 0 a 4 años que viven en áreas de difícil acceso a fin de que reciban educación inicial de tal manera que la pobreza extrema no sea una limitante para su pleno desarrollo.
Los resultados alcanzados son muy positivos reconoce la ministra del MIDES, María Inés Castillo, pues es un claro ejemplo es lo que han logrado Yeliani y Adir en los nueves meses que llevan desarrollando la metodología.
En este periodo estos pequeños han aprendido a contar los números a reconocer los colores primarios e identifican las partes del cuerpo, un estímulo que lo realiza con solo dos años y en sus primeros mil días de nacimiento, periodo donde desarrollan el 87% de sus cerebros.
Juntos con sus padres quienes son los que les dictan las clases están desarrollado la habilidad de trabajar en equipo, una destreza que les permite llegar a acuerdos para resolver problemas y conflictos. También se les enseña la importancia de los valores, cimientos en la que se formarán como buenos ciudadanos.
El proyecto que está beneficiando a 100 niños de la Comarca y a 5 mil de regiones remotas del país fortalece el vínculo familiar, que con esta iniciativa los padres están tomando un rol protagónico en el desarrollo de sus hijos.
En Playón Chico cinco promotoras del MIDES visitan dos y tres veces al mes a los niños para supervisar sus avances y medir cuánto han aprendido. Estas supervenciones tienen una doble función, la primera es corroborar que los padres estén utilizando correctamente la guía e identificar si algún niño presenta alguna deficiencia que requiere una intervención especial.
La ministra Castillo dijo que lo interesante es que este proyecto se está desarrollando en el corregimiento de Ailigandí, donde no existe una oferta que promueva aprendizajes tempranos a niños menores de cuatro años y donde el índice de pobreza multidimensional es del 96.9% de acuerdo al IPM-C elaborado por el Gabinete Social.
Testimonios
Wendy Stocel asegura que el proyecto ha logrado que su hijo Adir adopte patrones de conducta que le han permitido identificar cuándo es tiempo de comer, de jugar, de tomar siesta, de hacer tareas y de dormir. Rutinas que son esenciales para su sano crecimiento y su inserción al sistema escolar.
Mientras que Laura González indicó que su nieta Yeliani ha adquirido habilidades sociales como trabajar en equipo, logrando así aplicar esa interacción social que según los expertos es esencial para su crecimiento.
La mochila contiene artículos sencillos como son: rompecabezas, libreta de dibujo, crayones, cubos, balón, juegos didácticos, libro de lectura y una guía de 72 páginas estructurada con actividades semanales de interacción o aprendizaje diseñadas por edades. También ofrece una guía para confeccionar juguetes en familia que se elaboran a bajo coste con productos reciclados o propios del medio.
Con botellas de plástico y unas vasijas se arman maracas y un tambor. Mientras que, con tapaderas de botellas e hilo, diseñan collares que les permiten ordenar ideas y seguir instrucciones. Y con retazos de tela e hilo se confecciona muñecos que permitan realizar múltiples dinámicas de aprendizaje. Aquí cada juego tiene una intención pedagógica.
Los cerebros de los niños están en constante crecimiento
Yohana Pinzón, especialista en primera infancia de la Unicef, indicó que, durante los primeros años de vida, el cerebro aumenta cinco veces su tamaño hasta llegar a la edad adulta, esto implica que se den dos factores “la proliferación de las conexiones sinápticas entre las neuronas y la mielinización de fibras nerviosas”, que en otras palabras es la conexión necesaria entre las neuronas, que permitirán la comunicación del sistema nervioso con el resto del cuerpo.
Para que se den estas conexiones y se creen otras, se deben brindar estímulos tales como hablarle, cantarle, arrullarlo, acariciarlo, jugar, dejarlo explorar, sonreírle, etc. Todas estas interacciones se realizan a través, de las rutinas diarias y usando el juego, un servicio que ofrece la Mochila Cuidarte.
Pinzón asegura que cada vez que un adulto interactúa con el niño o niña está contribuyendo al desarrollo de sus capacidades cognitivas, físicas, emocionales y sociales.
La especialista añade que cuando un niño es estimulado existe diferentes áreas del desarrollo y que evolucionan. Estas áreas son las llamadas motrices; área sensor-perceptiva; área cognitiva; área lenguaje y comunicativa y área socioafectiva.
Para la pediatra Geraldine Norte, de la Sociedad Panameña de Pediatría, los primeros mil días de la vida de un niño son primordiales y mucho depende de estos días para desarrollar su potencial y las oportunidades necesarias para que puedan crecer saludables, incluyendo la predisposición al aprendizaje y al mejor desarrollo socioemocional posible.
La especialista explicó que en este período es que se instauran las bases de la salud y también de las capacidades que permitirán tener éxito en los estudios, en la capacidad de resolver problemas y ser productivos en la vida adulta.
La intervención de la “Mochila Cuidarte” está generando resultados prometedores en lo referente a las prácticas de crianza positiva. Con este proyecto Yeliani y Adir están teniendo la misma oportunidad de desarrollo que los niños de la capital. Con la Mochila están construyendo habilidades cognitivas a través, de la cual están aprendiendo mientras juegan. Este método de aprendizaje incidirá en su desarrollo porque cada acción y estímulo quedará grabado en su memoria para siempre.