El FMI continuará, por tanto, monitoreando “de cerca” los desarrollos y evaluando las implicaciones potenciales para el panorama económico y la estabilidad financiera mundial, informó su directora Kristalina Georgieva.
La directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, alertó este domingo sobre un aumento de los riesgos para la estabilidad financiera mundial y llamó a permanecer vigilantes ante las implicaciones potenciales de la crisis bancaria para la economía.
Georgieva hizo estas declaraciones en Pekín, en un discurso ofrecido con motivo de su participación en el China Development Forum en el que reconoció que los riesgos para la estabilidad financiera han aumentado.
“En un momento de mayores niveles de deuda, la rápida transición de un período prolongado de bajas tasas de interés a tasas mucho más altas, necesarias para combatir la inflación, inevitablemente genera tensiones y vulnerabilidades, como lo demuestran los acontecimientos recientes en el sector bancario en algunas economías avanzadas”, apuntó.
Georgieva se refirió así a la crisis bancaria iniciada por la caída del banco estadounidense Silicon Valley Bank, que dio paso a que otros bancos se declararan en problemas.
En su opinión, “las autoridades han actuado con decisión en respuesta a los riesgos para la estabilidad financiera, y los bancos centrales de las economías avanzadas han mejorado la provisión de liquidez en dólares estadounidenses”.
Estas acciones, añadió, “han aliviado la tensión del mercado hasta cierto punto, pero la incertidumbre es alta, lo que subraya la necesidad de vigilancia”.
El FMI continuará, por tanto, monitoreando “de cerca” los desarrollos y evaluando las implicaciones potenciales para el panorama económico y la estabilidad financiera mundial.
“Estamos prestando mucha atención a los países más vulnerables, en particular los países de bajos ingresos con altos niveles de deuda, y proporcionaremos una evaluación detallada en nuestro próximo informe Perspectivas de la economía mundial y estabilidad financiera mundial”, señaló la directora.
El 9 de marzo se conocía la quiebra del banco estadounidense Silicon Valley Bank, que se unía a la protagonizada días antes por Signature Bank, que desataron fuertes turbulencias en las bolsas mundiales.
Unos días después una nueva crisis salpicó al banco suizo Credit Suisse que derivó en su compra por parte de UBS, con el aval de las autoridades, y la semana pasada se produjeron nuevas turbulencias en los mercados ante la desconfianza generada por el alemán Deutsche Bank, después de anunciar la amortización de deuda subordinada antes de su vencimiento.