Según datos oficiales, alrededor de 30 millones de brasileños padecen hambre
Como una “enfermedad maldita” que “no tiene por qué existir en Brasil”, calificó este martes al hambre, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, tras urgir a sus ministros a poner más empeño en la lucha contra este flagelo, informaron agencias de noticias internacionales.
“En Brasil tenemos todo lo necesario” para acabar con el hambre y ese problema. Solo no será resuelto, si los funcionarios actúan como burócratas”, que “dejan para mañana lo que deben hacer hoy”, manifestó Lula, durante una reunión ministerial con miembros del Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional.
Planteó que todo el gobierno debe asumir como “un compromiso de vida el acabar con esa enfermedad maldita, en un país que es uno de los mayores productores de alimentos del mundo.
“No tenemos derecho” a permitir eso, enfatizó el mandatario, quien recordó que cuando volvió al poder, en enero del 2023, lo hizo con la promesa de “acabar con el hambre” y el compromiso de que ese objetivo sea “la prioridad cero del país”.
Alrededor de 30 millones de brasileños están en condición de hambre, de acuerdo a una encuesta de la Red Brasileña de Investigación en Soberanía y Seguridad Alimentaria.