El embarazo adolescente es hasta dos veces más frecuente entre las menores más pobres, pertenecientes a comunidades rurales
Un plan para frenar los embarazos infantiles en Panamá cuesta el equivalente a tres meses de ingresos del Canal, estimó un estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas, informó la agencia EFE. Eso significa unos $830 millones según el último reporte.
Un estimado de 14 países que realizó el Fondo de Población sobre costo de oportunidad de no reducir el embarazo adolescente: “La cifra de lo que pierde un país si esta situación se mantiene es el 0,28 % del PIB”.

Para ejemplificar el dato, sumó que en Panamá ese costo de oportunidad es equivalente a tener detenidos los ingresos del Canal de Panamá por aproximadamente tres meses, sabiendo que este “es la columna vertebral económica del país”.
En América Latina y el Caribe 36,000 menores de 15 años se convierten en madres cada año, lo que significa que cuatro niñas dan a luz cada minuto en la región, alerta el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
“Esto sucede sobre todo en comunidades afrodescendientes e indígenas, donde las niñas pierden el control de su cuerpo”, evidenció la directora regional para América Latina y el Caribe del Fondo de UNFPA, Susana Sottoli.
En la quinta Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Sottoli fue la encargada de inaugurar y clausurar la reunión en la que trataron temas como el embarazo adolescente o la muerte materna.
La directiva de UNFPA mostró su preocupación por el sector más joven de las comunidades que tienen menos acceso a recursos médicos o medios anticonceptivos.
Sin embargo, Sottoli puso el foco de alerta en los embarazos de niñas menores de 14 años, que viven un incremento preocupante: “Estamos hablando completamente de otro fenómeno y es directamente la violación y los abusos sexuales, que requieren cuanto antes un abordaje de la Justicia de penalización”.
Según el Reporte del Estado de la Población Mundial 2024 del UNFPA, el embarazo adolescente es hasta dos veces más frecuente entre las adolescentes más pobres, pertenecientes a comunidades rurales, indígenas y afrodescendientes de la región.
A la situación de las mujeres discriminadas racialmente, se les suma otra dificultad, “sobre todo si es una mujer que no es heteronormativa”, pues suelen sufrir una mayor exclusión social por parte de su propia comunidad.
“La economía de todo un país pierde económicamente si más mujeres siguen muriendo en el parto y sin más niñas siguen embarazando se prematuramente”, dijo Sottoli.
Por eso mencionó los datos de un estimado de 14 países que realizó el Fondo de Población sobre costo de oportunidad de no reducir el embarazo adolescente: “La cifra de lo que pierde un país si esta situación se mantiene es el 0,28 % del PIB”.
Para ejemplificar el dato, sumó que en Panamá ese costo de oportunidad es equivalente a tener detenidos los ingresos del Canal por aproximadamente tres meses, sabiendo que este “es la columna vertebral económica del país”.
Según estudios realizados por el UNFPA en 10 países de la región, el embarazo en adolescentes puede significar un costo de hasta $9,500 millones al año, y por cada dólar invertido en prevención, recibirían un retorno que oscila entre los $20 y $40.