El presidente reformista aseguró una vez más que su país no busca una bomba nuclear: “Ustedes lo han verificado 100 veces. Háganlo 1,000 veces más”
El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, abrió este miércoles la puerta a inversiones de empresas de Estados Unidos en el país, días antes de que Teherán y Washington mantengan negociaciones acerca del programa nuclear iraní en Omán, informó la agencia EFE.
“El líder supremo Alí Jameneí no tiene objeciones a que haya inversores estadunidenses en el país. Que vengan los inversores”, dijo Pezeshkian en un discurso en Teherán.
“Nos oponemos a la conspiración, la subversión y las políticas equivocadas que están siguiendo”, afirmó en una aparente referencia a las amenazas estadounidenses de bombardear el país sino alcanzan un acuerdo nuclear y a la imposición de sanciones para cortar la venta de petróleo.
El presidente reformista aseguró una vez más que su país no busca una bomba nuclear: “Ustedes lo han verificado 100 veces. Háganlo 1,000 veces más”.
Irán y Estados Unidos mantendrán el sábado un encuentro en Omán para negociar el programa nuclear iraní, que según el presidente estadounidense, Donald Trump, serán “conversaciones directas” mientras Teherán sostiene que serán “indirectas”.

Un día antes de las declaraciones de Pezeshkian, el ministro iraní de Exteriores, Abás Araqchí, ya habló de posibles inversiones estadounidenses en el país persa en una columna publicada en el diario Washington Post.
“Son las administraciones estadounidenses y los impedimentos del Congreso, no Irán, los que han impedido a las empresas estadounidenses acceder a la oportunidad millonaria que representa el acceso a nuestra economía”, escribió el diplomático.
Como ejemplo, Araqchí mencionó que cuando se firmó el pacto nuclear de 2015 Irán negoció de manera inmediata un acuerdo con Boeing para la compra de 80 aviones.
“Decir que el potencial de comercio e inversión en Irán es incomparable es quedarse corto”, aseguró el político que representará al país persa en las conversaciones de Omán el sábado.
El analista Gregory Brew consideró en un mensaje en X que la “República Islámica está tratando de hablar el lenguaje de Trump” por las referencias explicitas a las oportunidades de negocio de las autoridades iraníes.
Durante su primer mandato, Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo firmado en 2015 entre Irán y otras potencias que establecía límites estrictos a las actividades nucleares de Teherán a cambio de un alivio de las sanciones.
Desde entonces, Irán enriquece uranio muy por encima de lo permitido en el extinto acuerdo y ya posee 274 kilos enriquecidos al 60% de pureza, cercano al uso militar del 90%, según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA)