Se sacrificaron 26,082 cabezas de ganado vacuno, frente a las 26,795 del mismo mes del año anterior, y en el caso del ganado porcino, la cifra fue de 54.953
Panamá registró una disminución en el sacrificio de ganado vacuno y porcino durante el mes de abril, según revela un reciente informe de la Contraloría General de la República, donde las cifras reflejan una caída del 2,7% en reses y del 2,3% en cerdos en comparación con el mismo mes del 2024.
En concreto, se sacrificaron 26,082 cabezas de ganado vacuno, frente a las 26,795 del mismo mes del año anterior, y en el caso del ganado porcino, la cifra fue de 54.953 cabezas, por debajo de las 56.242 reportadas en abril de 2024.
El informe desglosa el comportamiento del sacrificio de ganado vacuno por provincia, donde los mataderos de Panamá, Herrera y Panamá Oeste mostraron las mayores reducciones con caídas del 19%, 11,6% y 45,2%, respectivamente.
Por el contrario, Los Santos, Chiriquí y Veraguas registraron incrementos de 4,2%, 2,5% y 0,1%, lo que evidencia una dinámica desigual entre regiones.

Pese a la baja de abril, el acumulado del primer cuatrimestre del 2025 muestra una mejora general en la actividad del sacrificio de ganado vacuno, con un incremento del 3,5%.
En total, se contabilizan 110,194 cabezas sacrificadas entre enero y abril, frente a 106,456 en el mismo periodo del 2024, lo que representa una recuperación de la tendencia a la baja iniciada desde el 2021.
Los principales distritos con mayor cantidad de sacrificios vacuno fueron: Las Tablas con 9,718 cabezas; David con 4,665; Panamá con 3,398; Santa María con 2,407; Santiago con 1,830; Soná con 1,689 y La Chorrera con 495.
En contraste, el ganado porcino muestra una tendencia descendente, reflejando que en el acumulado de los primeros cuatro meses del 2025 se sacrificaron 195,533 cerdos, lo que representa una disminución del 5,7% frente a las 207,361 unidades del mismo periodo del año anterior.
En tal sentido, el comportamiento mixto del sacrificio de ganado refleja los ajustes del mercado agropecuario ante factores como el consumo interno, las exportaciones, los costos de producción y la disponibilidad de insumos.
Mientras el sector vacuno muestra señales de recuperación sostenida, el porcino experimenta una contracción que podría vincularse a menores márgenes o cambios en la demanda.