Mientras crecen las cancelaciones tras la declaratoria de estado de emergencia en la región
La prolongada jornada de protestas que ya suma casi seis semanas en la provincia de Bocas del Toro ha generado una grave crisis en el sector turístico, así lo confirmó Juan Pablo Caro, presidente de la Cámara de Turismo de Bocas del Toro (Camturbo), según un informe del diario La Estrella.
Según el dirigente, la ocupación hotelera se encuentra en mínimos históricos, con niveles que oscilan entre el 10% y 20%, mientras crecen las cancelaciones tras la declaratoria de estado de emergencia en la región.
“La mayoría de los hoteles y zonas de hospedaje están entre 10% y 20% de ocupación, y la situación solo empeora con la incertidumbre generada por las protestas”, declaró Caro.
La parálisis ha provocado graves afectaciones también en restaurantes y otros servicios turísticos, con una caída del 80% en sus ingresos, lo que pone en riesgo cientos de empleos. “Los números están en rojo. Si no se toman acciones pronto, la pérdida de plazas laborales podría ser devastadora”, advirtió Caro.
Actualmente, más de 115 hospedajes en la zona se encuentran en riesgo de cierre, y muchos reportan estar evaluando la liquidación de hasta el 80% de su personal.
Sin embargo, la falta de atención institucional agrava el panorama: “No hemos podido hacer el cese de contratos laborales porque no hay nadie en el Ministerio de Trabajo de Bocas del Toro”, denunció el empresario.
A la preocupación económica se suma el temor por el deterioro de la imagen turística de la provincia, un destino tradicionalmente atractivo para visitantes nacionales e internacionales.
Caro mencionó con inquietud el caso de una turista estadounidense que fue retenida por manifestantes en la comunidad de Alto Guabo, en Chiriquí Grande, hecho que podría afectar la percepción de seguridad en la región.
“Privar a alguien de su libertad de movimiento es un delito, y si se trata de una ciudadana de uno de nuestros principales mercados emisores, el impacto es aún más negativo”, lamentó.
Según datos de la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), solo en los dos primeros meses del año ingresaron al país más de 89,000 turistas estadounidenses, siendo el grupo más numeroso que visita Panamá.
Entre las principales demandas del sector turístico está la mejora urgente en la conectividad de la provincia, que incluye la modernización del aeropuerto José Ezequiel Hall, el arreglo de carreteras y la mejora en el acceso al agua. Caro señaló que estas necesidades no han sido atendidas por falta de voluntad política y gobernabilidad.
Pese al sombrío panorama, la ATP ha puesto en marcha una serie de estrategias de contingencia para apoyar al sector. Gloria De León, directora de la institución, anunció que se trabaja en la creación de un corredor marítimo entre Colón e Isla Colón, además de un posible puente aéreo desde Puerto Limón.