Poco tiempo después de que Hamás atacó a Israel el 7 de octubre, amigos y familiares de Gali Shlezinger Idan, quien vivía en un kibutz cerca de la frontera con Gaza, recibieron mensajes desesperados que les pedían que revisaran su página de Facebook.
Lo que hallaron fue impactante. Miembros de Hamás estaban usando la cuenta de Facebook de Idan para transmitir en vivo que ellos la tenían a ella y a su familia como rehenes. Durante una transmisión de 43 minutos, hombres armados obligaron a Idan y su familia a ponerse en cuclillas sobre un suelo de mosaicos mientras caían misiles y disparos sobre su edificio.
No podía creer lo que veía”, comentó Keren de Via, una amiga de la familia de Idan quien vio cómo los hijos de Idan abrazaban a sus padres y lloraban durante toda la transmisión. “¿Cómo podíamos verlos aterrorizar a la familia de esa manera? ¿Cómo se puede ver eso en Facebook?”.
En una nueva táctica de guerra, Hamás ha tomado las cuentas en redes sociales de israelíes secuestrados y las ha usado para transmitir mensajes violentos y librar una guerra psicológica, según entrevistas con trece familias israelíes y sus amigos, así como con especialistas en redes sociales que han estudiado a los grupos extremistas.
Al menos en cuatro casos, los miembros de Hamás ingresaron a las cuentas personales en redes sociales de sus rehenes para transmitir los ataques del 7 de octubre. En los días transcurridos desde entonces, parece que Hamás también se infiltró en los grupos de Facebook de sus rehenes, así como sus cuentas de Instagram y chats de WhatsApp, para emitir amenazas de muerte y llamados a la violencia.
De acuerdo con los amigos y familiares de los rehenes israelíes, los miembros de Hamás también tomaron sus teléfonos celulares para hacerles llamadas con el fin de provocarlos. El Ejército israelí ha señalado que Hamás ha tomado como rehenes al menos a 199 personas.
Desde hace mucho tiempo, los grupos extremistas han recurrido a las redes sociales para promover sus causas con transmisiones de ataques en vivo y publicaciones de propaganda. Pero apropiarse de las cuentas personales de Facebook, Instagram y WhatsApp de los rehenes “convierte en armas a las redes sociales de un modo que creo que nunca antes habíamos visto”, señaló Thomas Rid, profesor de Estudios Estratégicos en la Universidad Johns Hopkins. “No estamos preparados psicológicamente para esto”.
Esta táctica es espeluznante en particular para quienes son cercanos a los propietarios de las cuentas y agrava lo que ya es una situación angustiosa.
Las redes sociales se han convertido en un salvavidas para amigos y familiares que buscan pistas de sus seres queridos desaparecidos, y recibir un mensaje o ver un video publicado en las cuentas les generó de inmediato una esperanza, según comentaron dos de las familias cuyos familiares fueron tomados como rehenes de Hamás. Pero esta se desvaneció cuando se dieron cuenta de que alguien más había hecho las publicaciones.
Tal vez, por un instante, me sentí esperanzada… luego desconcertada y después aterrorizada por completo”, comentó De Via.
Meta, empresa propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp, se rehusó a hacer comentarios sobre la apropiación de las cuentas en redes sociales de los israelíes secuestrados, pero mencionó que había establecido un centro de “operaciones especiales atendido por especialistas, entre los que se encuentran personas que hablan con fluidez árabe y hebreo, a fin de vigilar de cerca y responder a esta situación que se desarrolla con rapidez”.
Dos miembros del equipo de seguridad que monitorea Facebook, que no quisieron ser identificados porque no tenían autorización para hablar en público, confirmaron que Hamás había accedido a las cuentas de Facebook de los israelíes tomados como rehenes para hacer transmisiones en vivo y publicaciones en sus cuentas. Agregaron que, al parecer, eso era parte de la estrategia de Hamás desde el momento en que ocurrieron los ataques. También mencionaron que, desde entonces, las cuentas se hicieron privadas y se eliminaron las transmisiones en vivo.
Los representantes de Hamás no respondieron a la solicitud de hacer comentarios.
La cuenta de Facebook de Idan fue tomada el 7 de octubre, apenas dos horas después de que Hamás atacara Nahal Oz, el kibutz donde ella vivía con su esposo y sus cuatro hijos. Según un familiar y De Via, repentinamente apareció una transmisión en vivo en su página de Facebook.
De Via, quien fue vecina de Idan y cuyos hijos son de la misma edad, afirmó que había estado tratando de comunicarse con Idan cuando de pronto apareció el video en vivo.
Lo abrí de inmediato porque ella no es una persona que haga videos en Facebook ni transmita en vivo”, comentó De Via. “Lo primero que vi fue lo aterrados que se veían los niños y, después, voces en árabe. Entendí que algo muy malo estaba ocurriendo”.
Una grabación de la transmisión en vivo muestra a Idan, de 50 años, y a su esposo, Tzachi, de 51, en cuclillas sobre el suelo con sus dos hijos más pequeños, una niña y un niño. El chico, de 7 años, estaba llorando y preguntando: “¿Dónde está mi hermana?”.
Fue entonces cuando entendí que sus dos hermanas más grandes no estaban ahí; luego vi la sangre en las manos de Tazchi y pensé lo peor”, explicó De Via.
Posteriormente, personal médico encontró el cuerpo de la hija mayor de Idan, Mayan, quien acababa de cumplir 18 años. La habían asesinado a disparos. La tercera hija de la pareja no estaba en casa, señalaron De Via y el familiar de Idan. Al final, dejaron a Idan y a sus hijos en su casa y se llevaron al esposo como rehén. Idan no respondió a nuestra solicitud de comentarios.
Hamás también se apropió de la cuenta de Facebook de Dikla Arava, de 50 años, otra residente de Nahal Oz. Los agresores usaron la cuenta para hacer una transmisión en vivo. Durante esta transmisión de 20 minutos, se veía cómo obligaban al hijo adolescente de Arava a salir y decirles a sus vecinos que era seguro y que debían salir.
Dos de los familiares de Arava que vieron el video y compartieron la grabación con The New York Times afirmaron que era espantoso que los hombres armados hubieran usado al adolescente para intentar atraer a otras personas. Hamás secuestró a Arava, a su pareja y a sus tres hijos. La semana pasada, publicaron un video en un canal de Telegram afiliado a Hamás en el que aparecía una de las hijas adolescentes de Arava en Gaza.
Muchos israelíes han seguido suplicando en todas las redes sociales que les den información, ya que las ven como la única manera de darles voz a los rehenes y esperanza a sus familias.
Lian Gold, un DJ de Tel Aviv que conocía a muchas personas que eran empleados y asistentes del festival de música Nova, cerca de la frontera con Gaza, creó una página de Instagram y un canal de Telegram llamado WeAreOneIsrael para compartir imágenes de los desaparecidos.
Recibo mensajes en los que me piden: ‘Por favor, ayúdame, por favor, por favor, por favor’”, comentó Gold. “Así que, ¿qué puedo hacer? Solo lo publico y albergo la esperanza de encontrar algo”.