Francia exige a Panamá una serie de criterios para retirarlo de la lista de paraísos fiscales, donde le volvió a incluir tras el escándalo de los Papeles de Panamá
El ministro de Economía y Finanzas de Panamá, Dulcidio De la Guardia, aseguró este jueves en Davos que quiere trabajar “de la mano” con Francia para que el país le saque de su lista de paraísos fiscales.
“Tenemos un diálogo muy amplio con el gobierno francés, el ministerio de Economía ha sacado un comunicado donde ha reconocido los avances importantes de Panamá y seguiremos trabajando de la mano con ellos”, dijo De la Guardia.
Francia exige a Panamá una serie de criterios para retirarlo de la lista de paraísos fiscales, donde le volvió a incluir al país centroamericano tras el escándalo de los Papeles de Panamá.
Los millones de documentos filtrados del despacho de abogados panameño Mossack Fonseca y publicados a principios de 2016 pusieron al descubierto el dinero oculto de líderes políticos, deportistas o personalidades del espectáculo a través de sociedades ‘offshore’.
El ministro De La Guardia rechazó de momento hablar de posibles sanciones a las compañías francesas en el país en caso de fracaso de las negociaciones.
Sin embargo a principios de enero la vicepresidenta y canciller panameña, Isabel de Saint Malo, dijo que el gobierno que preside Juan Carlos Varela tendrá “firmeza” para “tomar las acciones que correspondan”.
“Pese a todo lo que ha hecho Panamá todavía tenemos trabajo para cambiar esa imagen de paraíso fiscal, de país que no es cooperador con la comunicad internacional”, reconoció De La Guardia.
Al contrario de otros países de la región, como México, que esperan con incertidumbre la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, Panamá se muestra más optimista
“La realidad es que muchas de las políticas de la administración Trump parece que van a generar una aceleración del crecimiento en Estados Unidos. Y todo eso es positivo en el contexto del comercio mundial” dijo De La Guardia.
El sector del transporte y de las telecomunicaciones – que incluye la actividad del Canal, muy dependiente del comercio mundial – es la “piedra angular” de la economía panameña y representa un 20% de la actividad.
Vienen después el sector inmobiliario, el comercio, el turismo y el sector financiero y bancario.
“Una de las fortalezas de Panamá ha sido tener una economía muy diversificada que nos ha permitido capear los diferentes ciclos económicos a nivel internacional”, dijo De La Guardia, que recuerda que el sector de servicios legales para crear sociedades ‘offshore’, directamente implicado en el escándalo de los ‘Papeles’, representa menos del 1% del PIB.
Según datos del FMI, en 2016 Panamá creció un 5% y fue el segundo país con mayor crecimiento de América Latina.