,

Una Bolivia en crisis avanza hacia nuevas elecciones sin Evo Morales

Una Bolivia en crisis avanza hacia nuevas elecciones sin Evo Morales
La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Anez, se reúne con representantes de los movimientos sociales y miembros del sindicato de trabajadores Central Obrera Boliviana (COB), luego de que el Senado aprobara un proyecto de ley para convocar nuevas elecciones en 2020, en el palacio presidencial de Quemado en La Paz el 23 de noviembre. 2019. Foto: AFP

El gobierno provisional abrió el diálogo con los movimientos de protesta en torno a un acuerdo de “pacificación”, que ponga fin a los bloqueos y manifestaciones.

El Senado de Bolivia dio paso el sábado a nuevas elecciones generales sin Evo Morales como candidato, tras la violenta crisis que estalló en torno a la figura del exmandatario y que deja 32 muertos en un mes de protestas.

“Se aprueba por unanimidad (…) el Proyecto de Ley ‘Régimen Excepcional y Transitorio para la realización de Elecciones Generales'”, anunció el órgano legislativo reunido en sesión extraordinaria.

La iniciativa fue remitida la misma tarde para su aprobación en la Cámara de Diputados, donde deberá recibir luz verde antes de convertirse en ley con la firma de la presidenta interina Jeanine Áñez.

Simultáneamente, el gobierno provisional abrió el diálogo con los movimientos de protesta en torno a un acuerdo de “pacificación”, que ponga fin a los bloqueos y manifestaciones.

De concretarse ambas iniciativas, el llamado a nuevos comicios y la “pacificación” de las calles, Bolivia comenzaría a ver la luz después de atravesar por su peor convulsión en poco menos de dos décadas.

El primer paso lo dio el Senado anulando las elecciones del 20 de octubre, en las que Morales había obtenido un nuevo mandato de cinco años en un proceso que fue contestado por la oposición en las calles por presunto fraude. La OEA también dijo haber detectado graves irregularidades.

Se van a “dejar sin efecto legal las anteriores elecciones y sus resultados que ocasionaron la movilización ciudadana”, sostuvo el senador Oscar Ortiz, quien desde la oposición a Morales lideró las negociaciones que desembocaron en el borrador de la propuesta.

– MAS, dividido –
El proyecto, que en principio cuenta con el respaldo del Movimiento Al Socialismo (MAS) que lidera Morales, prevé igualmente la renovación del Tribunal Supremo Electoral, cuyos antiguos vocales fueron removidos bajo la sospecha de haber manipulado el escrutinio.

Además, cierra la puerta a la postulación de Morales, quien ejerció el poder por casi 14 años con una alta popularidad que fue menguando pese a sus logros sociales y económicos, debido a su empeño de mantenerse en el cargo aun con un referendo en contra en 2016.

Finalmente, fue el Tribunal Electoral el que le dio la oportunidad de presentarse el 20 de octubre.

Con mayoría en el Congreso, el MAS se muestra dividido en torno a Morales, quien de momento no ha avalado públicamente el proceso para superar la crisis.

Este proyecto “establece también una disposición para resolver una controversia que nos ha enfrentado a los bolivianos”, afirmó el senador Ortiz, aludiendo al artículo que impide que los “ciudadanos reelectos de forma continua durante los dos periodos constitucionales anteriores” puedan ser candidatos en la próxima contienda.

El expresidente, quien renunció tras perder el apoyo de los militares y la policía, consiguió la reelección en 2009 y 2014. Desde su llegada al cargo el 12 de noviembre, la exsenadora de derecha Áñez prometió elecciones en los próximos tres meses.

La Constitución le permite a Morales presentarse de nuevo a las urnas en 2025, cuando completaría 66 años.

“Él ha tomado la decisión de no participar en elecciones, así que nosotros por supuesto que vamos a presentar candidatos”, dijo a la AFP la diputada del MAS Sonia Brito.

– No a la “amnistía” –
Este sábado el MAS planteó una propuesta para blindar jurídicamente a Morales y sus excolaboradores, con una prohibición explícita de detenerlos o abrirles “procesos judiciales”.

Pero Áñez la salió al paso. “Todo aquel que ha cometido delitos y se ha burlado de la ley; ha cometido abusos, no tendrá amnistía de ningún tipo”, afirmó.

El viernes la Fiscalía abrió un proceso contra Morales por “terrorismo y sedición”, a raíz de un audio en que supuestamente se le escucha impartiendo instrucciones para cercar ciudades e interrumpir el abastecimiento de comida mediante el bloqueo de vías.

Tras dimitir, Morales partió al exilio en México denunciando un golpe de Estado, mientras sus seguidores lanzaron una contraofensiva que hundió en el caos a buena parte del país.

Además de los muertos y decenas de heridos y detenidos, las protestas impidieron el ingreso de comida y combustible a La Paz, donde de a poco se va restableciendo el abastecimiento.

El exgobernante había denunciado en días pasados los planes del gobierno de Áñez para enredarlo en un “juicio internacional” con base en un “montaje”.

Este sábado los dos hijos de Morales, Evaliz y Álvaro, salieron de Bolivia y arribaron a Buenos Aires. Según el dirigente indígena, su hija estaba siendo acusada de “enriquecimiento ilícito”.

Ninguno de los dos han ocupado cargos públicos y permanecían en la embajada de México en La Paz.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *