La ministra francesa de Exteriores, Catherine Colonna, ha escrito una carta al jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, para que intervenga ante las “injerencias extranjeras” al calor de las informaciones sobre pago de comisiones a miembros la Eurocámara por Catar y Marruecos.
“Es un tema del que esperamos que se puedan tomar medidas y que seguiremos con la mayor vigilancia”, señaló este miércoles la portavoz del Ministerio francés de Exteriores en una conferencia de prensa.
Preguntada sobre las alegaciones de que Marruecos podría haber sobornado a miembros actuales o pasados del Parlamento Europeo, la portavoz respondió que Francia quiere “que se aclare todo”, e hizo hincapié en que esos hechos “podrían ser particularmente graves si se demostraran”.
Recordó que tanto Colonna como el presidente francés, Emmanuel Macron, ya se pronunciaron tras las primeras revelaciones sobre posibles maniobras de influencia con pago de comisiones por parte de Catar y añadió que la Justicia “tiene que hacer su trabajo” y Francia espera que “pueda haber un veredicto”.
Además, se refirió a las medidas que ha tomado la Eurocámara “para que se aplique el principio de la transparencia y de la ejemplaridad” a todos sus trabajos y dijo que Francia quiere que se pongan en marcha, una cuestión que sigue “con la mayor vigilancia”.
Entre las informaciones más recientes sobre una posible implicación de Marruecos en esas maniobras de influencia mediante sobornos está la confesión del antiguo eurodiputado del Partido Demócrata italiano (PD) Pier Antonio Panzeri, quien reconoce que influyó en favor de ese país y de Catar a cambio de dinero y regalos, pero cuando ya no era miembro de la Eurocámara.
Según el periódico italiano “Il Fatto Quotidiano”, Panzeri explicó a los investigadores belgas que lo interrogaban que hubo un acuerdo con esos países después de concluir su mandato en el Parlamento Europeo en 2019, y que su cometido era trabajar para evitar resoluciones contra esos países y a cambio de una promesa de 50.000 euros.