Unos 1,400 colombianos participó en las obras de la vía acuática y otros combatieron en el bando liberal en Bocas del Toro
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, le pidió a su nuevo canciller, Luis Gilberto Murillo, que busque un acuerdo con Panamá para recuperar los cuerpos de dirigentes revolucionarios liberales y trabajadores colombianos que murieron en la construcción del Canal de Panamá, informó la agencia EFE.
El jefe de Estado colombiano instruyó a Murillo para que busque acuerdos con el presidente electo, José Raúl Mulino, con el fin de recuperar esos restos, cuyo número es indeterminado.
“Debemos lograr los acuerdos para recuperar esos cadáveres y la historia misma de Colombia, de cómo estuvimos a la vanguardia, no de las gentes que querían el atraso, sino de las gentes que querían la libertad y la democracia en toda América”, afirmó Petro.
Se estima que en Bocas del Toro, que antes perteneció a Colombia, están enterrados dirigentes revolucionarios liberales colombianos que lucharon bajo las órdenes de Rafael Uribe y de Catarino Garza.
Petro recordó que en Bocas del Toro “se reunieron lo que podría ser una internacional liberal latinoamericana”.
“Atacaron un cuartel conservador en la guerra civil, y fueron derrotados y allá enterrados, y sus cuerpos no recuperados, lo mismo que los cuerpos de los trabajadores colombianos que murieron en la construcción del Canal”, señaló.
El mexicano Catarino Garza intentó desde Texas, una revolución contra el régimen de Porfirio Díaz, que fracasó en 1893, tras lo cual acabó en el entonces departamento colombiano de Panamá, donde participó en la guerra civil de 1895, una de las muchas que tuvo Colombia en el siglo XIX.
El último de esos conflictos fue la Guerra de los Mil Días, entre 1899 y 1902, la más sangrienta de todas, que dejó al país devastado y una de cuyas consecuencias fue la separación de Panamá, instigada por Estados Unidos, que había adquirido los derechos para la construcción del canal interoceánico.
La separación de Panamá de Colombia fue proclamada en noviembre de 1903 y el Canal fue inaugurado en agosto de 1914.
Según los historiadores, en la construcción del Canal de Panamá trabajaron unos 75,000 obreros entre los que había unos 1,400 colombianos, pero también muchos españoles y sobre todo antillanos de islas como Barbados, Martinica y Trinidad.