La propuesta, lanzada por el presidente del país, se une al plan para construir refugios nucleares y el reclutamiento masivo de jóvenes para el ejército
El presidente de Polonia, Andrzej Duda, ha confirmado este jueves que su país teme realmente un ataque de Rusia al confirmar que ha pedido a Estados Unidos que traslade nada más y nada menos que su arsenal nuclear a su territorio, lo más cerca posible de Moscú, para de esta manera lanzar un claro mensaje de disuasión al Kremlin, informó el diario español La Razón.
Su planteamiento es claro: si tras la caída del Muro de Berlín se movieron hacia el este, es decir, hasta las mismas puertas de Rusia, el proceso debe ir acompañado de “un giro hacia el este de la infraestructura de la OTAN”. Y esto incluye, por supuesto, todo el aparato de guerra nuclear.
En una entrevista con el diario estadounidense The Financial Times, Duda sostuvo que “no sólo creo que ha llegado el momento, sino que además sería más seguro que esas armas estuvieran ya aquí”, por lo que ha pedido formalmente al presidente estadounidense, Donald Trump, adopte esta medida.

El mandatario polaco recordó que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció en 2023 que Moscú desplegaría armas nucleares tácticas en territorio bielorruso, también fronterizo con Polonia. “Rusia no tuvo duda alguna cuando decidió reubicar en Bielorrusia sus armas nucleares. No pidió permiso a nadie”, ha sostenido Duda, quien ha respaldado las recientes declaraciones del primer ministro polaco, Donald Tusk, sobre la posibilidad de obtener protección a través de la idea de Francia de extender su “paraguas nuclear” para cubrir a sus aliados europeos.
Sin embargo, ha quitado hierro a la propuesta del propio Tusk de que Varsovia desarrolle su propio arsenal nuclear y ha afirmado que serían necesarias “décadas” para lograrlo y ha descartado la posibilidad de que Estados Unidos vaya a poner fin su presencia militar en Polonia, dado que el país es “un aliado creíble” de Washington, que cuenta con “intereses estratégicos” en territorio polaco.

Con esta medida, Polonia, que ha sufrido en sus carnes la invasión rusa en el pasado, ha dejado claro que no está dispuesta a esperar largos debates sobre cómo responder a la amenaza de Rusia.
Esta misma semana, el primer ministro, Donald Tusk, anunció una serie de medidas radicales para reforzar la defensa nacional, entre ellas la retirada de Polonia de las convenciones internacionales que prohíben el uso de bombas de racimo y minas antipersona.
Durante su intervención en el parlamento, Tusk justificó la decisión argumentando que el país debe aprovechar “todas las opciones disponibles” para garantizar su seguridad.