Santos récords, Batman! La serie Detective Comics, donde el Caballero de la Noche debutó el 30 de marzo de 1939, publicó su número mil, en la semana de su octogésimo cumpleaños
Mientras crecía, vi versiones de Batman en los cómics y la televisión, pero uno de los grandes avances fue El regreso del Caballero Oscuro de Frank Miller (a veces llamado El regreso del Señor de la Noche), historieta de cuatro partes que presentó una versión más madura del héroe, que regresaba de su retiro para proteger a Ciudad Gótica una vez más. La versión de Batman presentada por Miller ayudó a allanar el camino para la versión de Tim Burton en la película de 1989 protagonizada por Michael Keaton, quizá la primera vez que mi amor por los cómics fue considerado menos infantil y más aceptable socialmente.
Desde entonces hemos tenido muchos Batman en el cine —sus encarnaciones en pantalla han oscilado entre exageradas (Joel Schumacher) y decorosas (Christopher Nolan)—, pero su principio rector se mantiene igual: “Batman jamás se da por vencido en su misión de proteger a los inocentes”, comentó Sanderson.
Creadores de cómics, historiadores y fanáticos me ayudaron a elegir momentos clave en Detective Comics para conmemorar la carrera de Batman:
Detective Comics era una serie de antología que comenzó en 1937; de ahí surgió el nombre de DC Comics. El Hombre Murciélago, como se le llamaba entonces en la serie, debutó en la historieta de seis páginas “El caso del sindicato químico”. (Fue publicada en marzo, aunque la fecha de la portada dice mayo, en una práctica que usaban los editores para mantener los cómics en los puestos de periódicos durante más tiempo). La historia presenta al comisario Gordon, al adinerado Bruce Wayne y a su alter ego encapuchado, quien no duda en lanzar a un criminal desde lo alto de un edificio.
Batman fue creado por el escritor y dibujante Bob Kane y el escritor Bill Finger, aunque pasaron varios años antes de que el segundo recibiera el reconocimiento por sus importantes contribuciones al canon. Una copia de Detective Comics número 27 se vendió en una subasta por 1075 millones de dólares en 2010.
El mundo de Batman se iluminó con la llegada de Robin, el Chico Maravilla. “Robin vuelve humano a Batman y también le da ligereza a las historias más oscuras de Ciudad Gótica, además de que, claro, atrae a los lectores jóvenes porque es alguien con quien pueden identificarse”, dijo Peter J. Tomasi, quien escribe la serie actual de Detective Comics.
A mí me enganchó. Cuando era un joven fanático en la década de 1970, Robin, en ese entonces Dick Grayson, fue uno de los primeros superhéroes que conocí. Fui testigo de su crecimiento hasta la adultez y de su transformación en Nightwing, un aventurero extrovertido y seguro de sí mismo que une a los héroes de DC de una manera en que nunca pudo Batman, un hombre más solitario. Desde que Dick Grayson se graduó de ese uniforme han surgido otros Robin, entre ellos el hijo de Bruce Wayne, Damian.
Michael E. Uslan, historiador de los cómics y productor de varias películas de Batman, dijo que esta publicación fue transformadora. “El Batimóvil de 1950 redefine a Batman, lo moderniza y lo traslada a una nueva generación, equipado con mejor tecnología”, comentó. (Desde entonces ha habido muchas versiones del Batimóvil).
La parte superior de la portada menciona un “agente de la ley indio”, un alguacil siux cuyo nombre es Ohiyesa Smith. Sin embargo, en una señal de cómo era la época, un personaje decide “que ese nombre es demasiado difícil de pronunciar” y lo llama Pow Wow, con base en su filosofía de hablar primero y recurrir después a la violencia, de ser necesario.
“Esta serie introduce el legendario ‘nuevo atuendo’ de Batman, con el círculo amarillo alrededor del símbolo en el pecho que tenía una nueva apariencia visual y un estilo distinto, también en cuanto al desarrollo del personaje y la historia”, dijo Uslan. “¡Los lectores de la época aún se sienten extasiados y conflictuados por este enorme cambio!”.
Los principales arquitectos de la evolución fueron el editor Julius Schwartz y el dibujante Carmine Infantino, quienes se propusieron el cambio para aumentar las ventas, con la esperanza de evitar así la cancelación de la serie.
Los productores de la serie de televisión de Batman querían aumentar la audiencia femenina, así que le pidieron a DC un personaje nuevo. Surgió Batichica, cuyo nombre real es Barbara Gordon, la hija del comisario de policía de Ciudad Gótica.
La carrera de Gordon como Batichica se acabó en 1988, cuando quedó paralítica tras recibir un disparo del Guasón. Gordon se convirtió en Oracle, una hacker y experta en monitoreo que asiste a los héroes de DC. En 2011, el personaje se sometió a una operación experimental con la que pudo regresar como Batichica a vigilar desde azoteas de los edificios. A muchos fanáticos les encantaría ver a Barbara Gordon y a Dick Grayson como un dúo dinámico romántico.
Batman no tiene diálogos en esta edición, titulada “La noche del cazador” o “Night of the Stalker”, lo que es artificioso pero funciona si crees que hay poco espacio para las palabras cuando el héroe está así de enfocado.
La historia —escrita por Steve Englehart, trazada y dibujada por Vin y Sal Amendola y entintada por Dick Giordano— comienza cuando nuestro héroe ve a los asaltantes de un banco asesinar a una pareja enfrente de su hijo, todo un déjà vu. Después de que se hace justicia, Batman regresa a casa y se quita la máscara. Ahí, “la pena estalla en su interior” al recordar cuando fue testigo de la muerte de sus padres cuando era niño. El texto final del cómic dice: “En esta solitaria torre, bajo esta gris iluminación y por este único momento en el infinito… él es ese niño de nuevo”.
Se revela otro lado de Batman en “¡No hay esperanza en el callejón del crimen!”, de Denny O’Neil y Dick Giordano.
Batman lleva a cabo su peregrinaje anual al sitio donde murieron sus padres y busca a Leslie Thompkins, mujer que consoló al joven Bruce Wayne aquella noche fatídica. Leslie le cuenta que lo sucedido la inspiró para dedicarse a la beneficencia con la esperanza de prevenir tragedias en el futuro. En un gesto extraordinario para Batman, agradece a Leslie y le da un tierno beso en la frente. Por la mañana, Alfred, su leal mayordomo, lo encuentra durmiendo plácidamente y con una sonrisa en el rostro.
Paul Levitz, cuya larga carrera con DC comenzó en 1972, dijo que el momento editorial del que más orgulloso está fue esta reunión de los creadores superestrella de la imprenta para este tomo histórico. Las ochenta páginas incluyen una texto en prosa de Walter Gibson, creador del personaje de la Sombra, en tributo a los primeros días de Detective Comics, cuando se incluían historias en prosa.
Otro hito de Levitz es que en 1978, cuando empezó a encargarse de la edición de Batman, leyó todos los tomos de Batman, Detective Comics y World’s Finest en los que salía el héroe. En ese entonces fue una tarea abrumadora y parece casi imposible actualmente.
Batwoman, a veces llamada Batimujer, fue presentada originalmente en Detective Comics #233 en 1956, en parte para darle a Batman la posibilidad de una relación amorosa. No tuvo mucho éxito. Incluyeron de nuevo al personaje en 2006 como Kate Kane, heroína lesbiana que había sido expulsada de las fuerzas militares. Esta Batwoman fue celebrada por los fanáticos, aunque estuvo en las páginas de Detective Comics durante un año antes de obtener su propia serie. En 2013, el equipo creativo del personaje renunció en protesta contra un decreto editorial a que la mostraran casándose; uno de los editores de DC Comics aseguró después que la decisión en contra de la boda fue por un edicto según el cual los personajes de Batman suelen sacrificar sus vidas personales por el bien mayor.
Este tomo de 96 páginas tiene varias historias escritas por un importante grupo de creadores (entre ellos Denny O’Neil, Geoff Johns, Kevin Smith y Brian Michael Bendis). La primera historia es “El caso más largo de Batman”, de Scott Snyder y Greg Capullo, y retoma partes de la primera aventura del Hombre Murciélago contra el sindicato químico.
Este tomo también presenta al Detectives Guild (sindicato de detectives), con varios miembros que tuvieron historias individuales extensas en Detective Comics, entre ellos Slam Bradley (portada de la publicación por doce años), Martian Manhunter (nueve años) y Hombre Elástico (cinco años).
“La riqueza, variedad y popularidad de estos personajes contribuyeron al éxito y la longevidad de Detective”, dijo Richard Roney, quien investigó a estos héroes secundarios.
George Gustines es editor en The New York Times. Comenzó a escribir sobre la industria de los cómics en 2002.