Un baño helado por 4,990 dólares

Un baño helado por 4,990 dólares
Tanque de inmersión en agua helada de Blue Cube. Foto, Blue Cube vía The New York Times.

La práctica del baño helado se ha vuelto tan popular, que ahora los fabricantes se han sumergido en el mercado para facilitarles a las celebridades y otros buscadores de bienestar, contar con baños helados perfectos cuando lo deseen.

En los primeros días de la pandemia, el entrenador de celebridades y nutriólogo Harley Pasternak compró un congelador de piso para su patio trasero. En aquel momento, Pasternak, de 48 años, quien trabaja con Ariana Grande, Maude Apatow y H.E.R., pensó que tal vez necesitaría almacenar un poco más de comida. Pero cuando vio que las tiendas en West Hollywood nunca cerraron, convirtió el congelador en una zambullida helada: un tanque de agua helada en el que podía sumergirse unos minutos al día para aliviar su dolor de espalda y ansiedad.

“Durante los primeros 30 segundos a 1 minuto, es una sensación espantosa”, dijo sobre la experiencia del baño helado. “Pero una vez superado ese tiempo, tienes esta sensación de tranquilidad y calma, y cuando sales, sientes una explosión de energía y positividad”.

Los adeptos de las inmersiones heladas dicen que la práctica ofrece todo tipo de beneficios, incluida la claridad mental, la gestión del dolor e incluso la pérdida de peso y mencionan a defensores como el conferencista motivacional neerlandés Wim Hof y el neurocientífico de Stanford, Andrew Huberman.

Se han hecho pocos estudios científicos sobre la práctica, pero Tracy Zaslow, doctora de medicina deportiva de 48 años en Cedars Sinai en Los Ángeles, dijo que hay datos que sugieren que la exposición al frío, como mínimo, ayuda con el dolor muscular. No hay datos claros científicos sobre si las inmersiones regulares en agua helada pueden ayudar con la ansiedad y la pérdida de peso.

Sin importar los beneficios, la práctica se ha vuelto tan popular que ahora los fabricantes se han sumergido en el mercado para facilitarles a las celebridades y otros buscadores de bienestar contar con baños helados perfectos cuando lo deseen.

Pasternak descubrió esto cuando buscaba una alternativa para su congelador, que resultó no ser el contenedor ideal para la práctica. El agua en su interior no circula, lo que significa que tras un minuto o dos, el calor del cuerpo de Pasternak aumenta la temperatura del líquido, lo cual le resta efectividad a la práctica. También era muy difícil mantenerlo limpio. “Recuerdo haber comprado en Amazon un tanque y un filtro para pecera”, comentó.

Por suerte, Pasternak descubrió que podía comprar una bañera creada específicamente para las inmersiones en agua helada. Hace más o menos un año, compró un Plunge, una bañera de 4,990 dólares que se conecta a la electricidad y filtra, hace circular y desinfecta el agua, además de que la enfría a menos de 4° Celsius. Pasternak la conserva en un espacio al aire libre en su gimnasio y algunas de las celebridades que entrenan con él, como Lizzo y Ashley Tisdale, ya han vivido la experiencia. A Lizzo le gustó tanto que compró una bañera de este tipo para su casa.

La carrera para crear y comercializar la tina de inmersión en agua helada para el hogar ya inició. Thomas Schiffer, fundador de Blue Cube, una empresa que vende baños de inmersión fríos a personas y spas comerciales, llamó a la competencia en esta industria pujante “las guerras frías”.

La oferta de Blue Cube incluye el tanque Mini-Me de inmersión en frío de 15.999 dólares diseñado para uso doméstico y el modelo Malibu 56 de 26.999 en el que pueden sumergirse en varias ocasiones al día en un entorno de spa. El conductor de un pódcast Joe Rogan tiene un modelo de Blue Cube en su estudio.

Tanto Plunge como Blue Cube iniciaron su negocio durante la pandemia y dijeron que han visto un crecimiento constante en las ventas (Plunge aumentó sus ventas después de aparecer en un capítulo de “Shark Tank” en mayo). Otras marcas que luchan por una porción del mercado incluyen Renu Therapy, que vende el modelo Cold Stoic en 9,699 dólares, y Morozko Forge, que vende una bañera de hielo cubierta de cedro por 12.850 dólares.

“Al ser una nueva industria, es una especie de viejo oeste”, comentó Schiffer, de 52 años. “Nosotros supusimos que serán tan omnipresentes como un sauna o un jacuzzi. Espero que el 10 por ciento o más de todos los propietarios de piscinas, saunas, saunas de infrarrojos y jacuzzis compren algún tipo de bañera de agua helada”.

Ryan Duey, cofundador de 36 años y director ejecutivo de Plunge, tiene ambiciones similares. En cinco años, quiere que Plunge sea considerado “el nuevo jacuzzi”.

¿Gastar varios miles de dólares en una bañera fría es necesario para obtener los beneficios, reales o imaginarios, de la terapia de agua helada? Probablemente no.

Lauren Schramm, entrenadora global de Nike y entrenadora de ejercicios de respiración y baños helados, dice que utiliza las conocidas bañeras de Rubbermaid, agua y bolsas de hielo cuando imparte sus clases de baños helados en Brooklyn.

Schramm, de 30 años, cobra 40 dólares por una clase de dos horas que incluye hasta 15 minutos en el agua fría (menos tiempo para principiantes), ejercicios de respiración y la creación de comunidades. Aunque ella toma baños helados con regularidad, no se ha comprado uno de los modelos más caros.

“El agua helada no es más que eso”, afirmó Schramm. “Puedes abrir la llave de agua fría de tu regadera y tendrás el mismo efecto”. Sin embargo, agregó “si tienes los medios y estás comprometido con la práctica, comprar una bañera de agua helada es más sustentable”, porque el agua puede volverse a usar una y otra vez. “Si esta es una inversión que te gustaría hacer y usar la bañera mejora tu experiencia, maravilloso”, agregó.

Remedy Place, un “club de bienestar”, tiene clases de baños helados por 50 dólares, en las que hasta tres personas pueden sumergirse juntas hasta por 6 minutos, mientras escuchan su música animada favorita. El club ofrece diversas prácticas de bienestar que incluyen el sauna infrarrojo y sesiones quiroprácticas, pero el fundador y director de Remedy, Jonathan Leary, dijo que la mayoría de la gente conoce Remedy por sus clases de baños helados. Dijo que, en el futuro, la empresa planea vender al público unidades para el hogar.

Schramm y Zaslow advirtió que quienes vayan empezando en las inmersiones de agua helada deben hablar con sus médicos de cabecera antes de darse un baño de este tipo por primera vez. Zaslow explicó que el mayor riesgo de la exposición al frío es la hipotermia y también se han dado casos poco frecuentes en los que el frío puede desencadenar arritmias o paros cardiacos, en especial entre personas con padecimientos de salud subyacentes.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *