La Defensoría del Pueblo, tras recibir información acerca de acoso y discriminación racial en algunos centros educativos estatales, visitó dos de las escuelas señaladas, en donde una directora agredió física y verbalmente a un funcionario de esta institución.
La Asociación de Afrodescendientes y la Comunidad Rastafari de Panamá, expusieron ante la Defensoría del Pueblo la situación de algunos estudiantes del sector oficial, quienes son víctimas de acoso (bullying) y discriminación racial.
Un comunicado emitido por la institución informó a ese respecto que, “instamos a la población educativa a ser tolerante unos con los otros, combatir el racismo en todas sus manifestaciones. Requerimos que el Ministerio de Educación “Meduca), adopte, de inmediato, medidas administrativas más estrictas contra la discriminación; mejorar la calidad y el acceso a la educación a favor de los niños, niñas y adolescentes”.
La información de la Defensoría del Pueblo añadió que, “las instituciones debemos fortalecer todas las medidas para poner alto a la discriminación que afecta a los afrodescendientes, pueblos indígenas, personas viviendo con VIH, migrantes, refugiados y a la comunidad LGBTIQ+. A su vez, es imperante que desde nuestros hogares enseñemos a los niños a combatir la discriminación, xenofobia, la intolerancia y el odio”.
“El Estado debe mantener liderazgos sostenidos y el compromiso de las instituciones de gobierno; pero de igual modo, requiere de involucramiento de todas las personas. Ante esta situación, la Defensoría del Pueblo procedió a abrir una queja de oficio contra tres centros educativos del sector estatal, luego de una inspección y acompañamiento a dos escuelas donde, incluso, una directora de un plantel agredió física y verbalmente a un funcionario de la entidad de derechos humanos”, destacó la entidad.